Nuestros Centros quieren contribuir a la formación de personas, estimulando a los alumnos/as a que adopten una actitud positiva, libre y decidida, de modo que orienten sus vidas en valores y con pleno sentido ante Dios, ante sí mismas y ante los demás. Nos comprometemos a hacer de nuestros Centros un espacio abierto a todos, con preferencia a los más pobres y necesitados, un ámbito de libertad y amor que favorezca un clima de fraternidad, acogida, austeridad, amor a la naturaleza, gratuidad, disponibilidad y servicio, sencillez y alegría. Pretendemos que nuestros Centros sean una instancia que permita hacer realidad los derechos humanos, proponiendo a nuestros alumnos/as el conocimiento y el análisis de su realidad social y el desarrollo de la verdad, la belleza y la bondad (actitudes positivas) para que opten siempre por la paz y el bien en un ambiente justo, solidario y fraterno.
